Louise Bourgeois – Un estudio propio

Tuve la ocasión de visitar la exposición “Strukturen des Daseins: Die Zellen” de Lousie Bourgeois durante su exhibición en la Hans der Kunst de Munich en febrero de 2015.

Como ya he comentado en algún otro post, lo que me condujo a Munich fue un congreso sobre marketing y el género femenino (Women buy 80%) por lo que parece del todo oportuno que mi visita coincidiera con la inauguración de esta “tremenda” exposición dedicada en exclusiva a las “celdas”, expresiones artísticas de Lousie Bourgeois durante más de tres décadas (1986 – 2008).

Lousie Bourgeois - cartel munich

Existe abundante información sobre estas particulares esculturas mediante las cuales la genial creadora mostraba sus ideas sobre “el espacio y la memoria, el cuerpo y la arquitectura, lo consciente y lo inconsciente”. Por ello, sin otro objetivo que el de dar mi particular visión sobre esta excepcional mujer, me gustaría hacer mención de uno de los datos que aportó Jerry Gorovoy, asistente personal de la artista durante los últimos treinta años de su vida.

Fue en el auditorio del Guggenheim Bilbao donde pude escucharle en conversación con Julienne Lorz, comisaria de la exposición, dentro del marco de las actividades organizadas por el museo en relación a la expo y denominadas “Reflexiones compartidas“.

Lousie Bougeois Conversaciones Guggenheim

No tuve la impresión de descubrir demasiadas novedades sobre la artista durante la charla (imagino que Gorovoy tiene “su libro” y habla de él allí donde es invitado a hacerlo). Sin embargo, hubo un dato que sí que capturó mi atención y fue el referido al deseo que tenía Louise Bourgeois durante su temprana relación con el arte de tener UN ESTUDIO PROPIO (“to have a studio of her own”).

¡No pude evitar pensar instantáneamente en la famosa obra de Virginia Wolf, Una habitación propia!

Y es que, al igual que la escritora inglesa nos convenció de la necesidad que tiene una mujer creativa de tener un espacio propio en el que desarrollar su creatividad, Lousie Bourgeois necesitó también contar con un estudio propio para la plasmación de su arte en los numerosos y diversos formatos en los que trabajó a lo largo de su extensa y prolífica vida.

Me identifico totalmente con esa necesidad de disponer de una atmósfera propia en la que la intimidad con una misma facilite el proceso creativo por lo que me gustó saber que tener un estudio propio fue un hecho muy relevante en la vida de Louise Bourgeois.

Como decía, existe abundantísima información sobre esta interesante exposición que algunos describen como “ un viaje por la vertiente más oscura de la artista” y que podrá visitarse en el Guggenheim Bilbao hasta el 4 de septiembre de 2016.